Ríe cuando estes triste, llorar es demasiado fácil.
La sonrisa es el idioma universal de los hombres inteligentes.
Ríe y el mundo reirá contigo, llora y sólo te mojarás la cara.
La alegría es la manera de demostrarle a la vida que no puede con nosotros y es la mejor menera de achicar a la tristeza.
Es de héroes sonreir cuando el corazón llora.
La felicidad está en las pequeñas cosas. Una pequeña mansión, un pequeño yate... (JAJAJA)
No es bueno quedarse recordando el pasado con tristeza , es mejor dar un paso sonriendole a la vida.
No es bueno quedarse recordando el pasado con tristeza , es mejor dar un paso sonriendole a la vida.(JAJAJA)
La mejor forma de conseguir la alegría de un buen amigo es estando más triste que él.
Sonríe siempre para no dar a los que te odian el placer de verte triste y para dar a los que te aman el placer de ser feliz.
Cuando naciste, tú llorabas y todos a tu alrededor sonreian; vive tu vida de manera que cuando mueras, tú sonrías y todos a tu alrededor lloren.
Buscar la felicidad es sólo otro pretexto para ser aún más infelices..
La mirada melancólica encierra la más grande de las bellas tristezas.
La tristeza es un sentimiento que siempre nos acompaña.
El valor de un hombre no se mide ni por su dinero, ni por su inteligencia ni por su felicidad; se mide por su capacidad de exteriorizar lo menos posible su tristeza.
El corazón no muere cuando deja de latir; el corazón muere cuando los latidos no tienen sentido.
Si ves la tristeza pasar bajo mi ventana, ponle esa escalera que tú mismo has construído para facilitarle para entrada.
Lo peor de la tristeza es que te ciega y pierdes el rumbo.
Si ríes, el mundo ríe contigo, pero si lloras, lo haces sólo.
La tristeza es la única emoción que te muestra lo que realmente te importa.
Cuando nos abunda la tristeza, nos hacemos débiles y perdemos la cabeza pidiendo por la muerte.
Que triste es ver pasar los días y darte cuenta de que realmente nada dura para siempre, y más si el ejemplo que tienes es el de tu propio amor...
No me preguntes porqué lloro, porque pueden ser tuyas las lágrimas que ensucian mi rostro.
Primero te mostraste bella e incomprendida y te acepté con esa mirada perdida.
Me hablaste de la alegría como una trampa para imbéciles, que obnuvila la razón, ¿pues cuanta razón tendrías que ya no me interesan las trivilidades de la vida?.
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